La seguridad está en los detalles

Apenas marcan las 02:00 de la mañana de un lunes, duermes tranquilo en un departamento ubicado en planta alta con ventanas sin protección hacia el exterior, y estás en una ciudad en la que ha aumentado el robo a casa-habitación cuando te despierta el intempestivo ruido de vidrios que se rompen con violencia en el interior del departamento. Te pones de pie en un brinco, y en tan sólo un par de segundos ya has valorado las distintas posibilidades: algún otro ocupante de la casa rompió por accidente algo; se venció un anaquel de la cocina; te han roto un vidrio por un acto vandálico; o… hay un extraño dentro de la casa… y, como todo buen Scout, también te has hecho de tu bordón (sí, soy de los que todavía aprendíamos defensa personal y usamos puntas tipo lanz). Decides probar suerte con la primera opción. “¡Están todos bien!” Respuesta afirmativa pero no confirman haber roto algo, momento de salir para probar las otras hipótesis…

Para bien, la fortuna sonríe y te encuentras con la casa vacía. El clavo del cual colgaba un jarrón se ha vencido, el jarrón ha caído y sus piezas, al volar por el impacto, se han ido a estrellar en uno de los cristales de la vitrina del comedor que se encuentra muy cerca del incidente. Todo en orden, excepto por algo raro: han empezado a tocar el timbre de la puerta con mucha insistencia. Te acercas a la ventana tratando de imaginar quién en su sano juicio, se esfuerza por descomponer tu timbre en medio de la noche…

 

Sorpresa… noche curiosa ha resultado ser ésta… Quien llama a la puerta es un oficial de policía, a unos metros de él, en la acera de enfrente, espera una patrulla estacionada con motor encendido pero luces apagadas, junto a la puerta del conductor espera de pie otro garante del orden público; evidentemente ha colocado así la unidad para tener dónde resguardarse en caso de ser necesario.

 

El policía de la puerta te interroga tratando de hallar en tu tono de voz, o en tu aspecto, algún indicio de mentira: -¿Todo está bien? ¿Necesitan ayuda de algún tipo? -Sí oficial, todo bien. -¿Qué ha pasado? -Nada grave, se ha caído un jarrón mal clavado a la pared y nos ha dado un susto. Sólo eso. -¿Está seguro que no necesita nada? -En verdad, estamos bien, gracias. -¿Podría darme su nombre? – Sí, es tal y tal -¿Qué dirección es esta? -Eh, bueno es tal y tal -De acuerdo, cualquier cosa que necesite no dude en llamarnos. Pase buena noche. -Gracias oficial, aprecio mucho la atención de ambos. -Buenas noches. -Buenas noches.

 

Puede parecer tonto, pero la presencia de los policías y, sobre todo, su disposición a atender un ruido sospechoso en medio del silencio de la noche, me hizo sentir seguro.

 

Y es que, contrario a lo que comúnmente se piensa, la seguridad no es la inexistencia de amenazas o de riesgos sino la presencia de certezas positivas frente a estos riesgos y amenazas. Por ejemplo, el use de gas butano y fuego puede ser muy peligroso, pero no por ello decimos que una casa equipada con cocina a gas es insegura.

 

Así, por fortuna, hoy sólo eran unos vidrios en el suelo, pero si se hubiese tratado de vidrios clavados por accidente en un ocupante de la casa, tener una patrulla habría facilitado el traslado a los servicios médicos. En cambio, si hubiera sido un asalto, la presencia de los policías habría sido de mucha ayuda. Son estos estos detalles, los que cambian la perspectiva de la ciudadanía, son estos detalles los que vuelven más segura a la ciudad. Felicito y agradezco a todos los policías que desarrollan su importante trabajo con compromiso y dedicación. Y en esta ocasión, en particular a los servidores públicos adscritos a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal.

ACTUALIZACIÓN: La SSP-DF tiene un excelente programa que consiste en asignar de fijo a un determinado policía (en realidad son tres) a una zona en particular. Se pueden consultar los nombres de los servidores públicos así como un teléfono en esta dirección: http://201.144.220.174/sspdf/cuadrantes.php De esa forma la ciudadanía le marca directamente al oficial y, dado que éste teóricamente siempre está en el área, la respuesta es inmediata.